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ORATORIO DE VALDECANALES

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Entorno histórico

El oratorio rupestre de Valdecanales, también llamado hipogeo de Valdecanales, es un eremitorio o cenobio de origen visigodo situado en el municipio de Rus, en la provincia de Jaén, a unos 7 km del municipio de Rus (Jaén), muy próximo al Cortijo y Arroyo de Valdecanales. Se sitúa en las proximidades del embalse del Giribaile, cercano al arroyo de Valdecanales y muy cerca, también, del antiguo Camino Real de Toledo a Granada. Más concretamente, lo encontramos excavado en la roca del cerro de la Fuente de la Alcobilla.

Su construcción está fechada entre los siglos VI y VII d.C. y se trata del único conjunto de hipogeos visigóticos en el sur de España. Descubierto por Rafael Vañó y Cesáeo Pérez en 1968.

El movimiento eremítico cristiano se origina en Oriente a partir de finales de los siglos III y principios del IV, y se expande por todo el imperio romano.

El eremita abandona los núcleos de población en busca de la soledad, porque su aislamiento en cuevas de parajes alejados de núcleos urbanos le permitía, por una parte, alejarse de la idolatría y la tentación y, por otra, doblegar espíritus y demonios en su propio terreno, todo ello a través de la oración y la mortificación del cuerpo.

Fue precisamente durante el gobierno de los visigodos, concretamente durante los siglos VI y VII, cuando se produjo la transformación del movimiento eremítico peninsular hasta convertirse en el primer movimiento monástico del que nos han llegado restos monumentales.

El desafío de una vida espiritual dura y la fama de “milagrosos” de los ascetas, generarán admiración en las gentes y aglutinará en torno suyo a discípulos y peregrinos, además de quienes vieron en estas comunidades la posibilidad de alcanzar prestigio y un mínimo vital. Esta es la forma en la que el refugio del ermitaño, y escenario de sus hazañas en la península, se transforma hacia formas cenobíticas y monásticas.

No podemos olvidar, además, la influencia que pudieron tener, en la transformación de los eremitorios en cenobios o monasterios, la cercanía de poblaciones de importancia o de caminos frecuentemente transitados.

Descripción

El conjunto se compone de tres cuevas de diferentes dimensiones excavadas en un estrato de arenisca. Las tres se encuentran muy próximas entre sí. La primera cueva (A) sería la estancia principal, cuya fachada cuenta con una arcada, tallada directamente sobre la roca, de unos 10 arcos ciegos en total, con forma de herradura, y de unas dimensiones de 1,40m. el diámetro del arco y a una altura de 5m. Algunos de ellos conservan la decoración original en forma de venera, palma o concha aplastada con 10 hojas de punta redondeada y cuyo centro común coincide con el arco. Las dimensiones de la fachada le otorgan un aspecto de grandiosidad. Este espacio presenta unas dimensiones suficientemente amplias como para albergar una concurrencia de personas relativamente numerosa.


En el interior de la cueva A, encontramos a su vez el espacio dividido en tres naves en las que se conservan decoraciones de sogueado. La función que se le atribuye a este espacio es litúrgica. De las tres estancias en las que se divide la cueva A, destaca una de mayor tamaño con una planta rectangular, mientras que las dos naves a ambos laterales, de menor tamaño, tienen una techumbre circular. Desde las naves se permite la entrada a dos nichos de menores dimensiones en forma de ábsides. Las tres naves abovedadas se encuentran separadas transversalmente por arcos.


La segunda cueva, Cueva B, que también lo es en importancia y tamaño, se encuentra muy próxima a la principal. Tiene planta cuadrangular y también cuenta con una techumbre abovedada. Junto a ella encontramos una segunda cámara con forma circular, posiblemente se trata de una capilla lateral que pudo ser utilizada como baptisterio, ya que sus dimensiones y forma la hacen apta para albergar una pila bautismal.


La tercera cueva, C, se encuentra más alejada de la principal, posiblemente porque se trataría del espacio de residencia de los eremitas que se encontraban en el lugar. Así mismo, tiene una planta rectangular y abovedada. Esta estancia se encuentra más próxima al manantial de agua y la disposición interior que presenta indica su idoneidad como vivienda.


Ni en la cueva B ni en la C encontramos la misma decoración que en la cueva principal, lo que parece indicar que la función de la cueva principal (A) sería de oratorio público, y las otras dos tendrían una función claramente de índole privado.


Aunque se considera el único de la zona del alto Guadalquivir que se conserva actualmente de esta época, sí podemos encontrar algunas similitudes; por ejemplo, en el Museo Arqueológico de Mérida se conservan canceles visigóticos con motivos decorativos similares de los conservados en fachada. Algunos otros ejemplos que podríamos comparar con el eremitorio rupestre de Valdecanales son el de Siete Altares en Segovia, San Baudelio de Berlanga o San Millán de la Cogolla.


Además de la excepcional riqueza histórica del conjunto, de su singularidad relacionada con la escasez de espacios similares en la zona, sorprende su gran valor estético, en parte relacionado con el medio natural en el que se localiza. La fuerte erosión que sufre la solera del oratorio al pie de los arcos, está relacionada con el uso del espacio durante los últimos siglos, ya que se ha utilizado como resguardo de pastores, monteros y leñadores. Esta salida y entrada de ganado es la que ha provocado este desgaste, sin embargo, no podemos olvidar que el haber tenido un uso ha propiciado también su conservación.


Rafael Caballero y Rubén Lot para URBS REGIA


 


Otra información de interés

Se encuentra abierto al público permanentemente
Importe entrada: Gratis

 

Bibliografía

VAÑO SILVESTRE, R., 1970: “Oratorio rupestre visigodo del Cortijo de Valdecanales, Rus (Jaén)”, Madrider Mitteilungen, 11, 213-222.
DE NAVASCUENDES Y DE JUÁN, J.M., 1970: “El oratorio de Valdecanales (Jaén)”, Boletín de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, 31, 82-84.
RIU RIU, M., 1969: “Cuevas-eremitorios y centro cenobíticos rupestres en Andalucía oriental”, Actas VIII Congreso de Arqueología Cristiana, Barcelona, 5-11.
HIGUERAS MUÑOZ, M.; PÉREZ VILLAESCUSA, M.L., 2016-2017: “El eremitorio de Valdecanales (Rus, Jaén). Una propuesta de protección, intervención y puesta en valor sostenible”, Alcazaba, 16-17, 55-74.

Portales

wikipedia.org
listaroja.hispanianostra.org
cortijovaldecanales.com
lugaresmiticosdejaen.com
europapress.es

One thought on “ORATORIO DE VALDECANALES”

  1. BERNARDO Perez Moya dice:

    Gracias por incluir mi maqueta en vuestro artículo. Es una reproducción figurativa realizada en arcilla con la que trate de representar lo que pudo haber sido el BIC en su momento. Es una enorme satisfacción para mi haber vivido el momento en el que mi padre Cesareo Pérez Diaz le contaba a Rafael Baño que tenía en su finca VALDECANALES una fachada que tenía unos arcos que desde su punto de vista no cumplían con la geometría de los arcos árabes sino con los Visigodos.
    A partir de ahí, Rafael Baño tomó cartas en el asunto y todo esto permitió que viniera una Universidad Alemana que hizo la identificación y datación del Monumento hasta ser declarado Monumento Nacional en 1970.
    Saludos
    Bernardo Perez
    Valdecanales

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