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CUEVA SANTA DE LIEBANA

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Agradecimientos

A nuestro colaborador Javier Pelaz Beci, socio de 4AeS, que nos ha proporcionado gran parte de la información y las fotografías que se utilizan es esta ficha.

Notas previas

  • Fue el retiro cenobítico del monje Santo Toribio, fundador, en el siglo VI, del monasterio de San Martín de Turieno.
  • Se estima que en el el siglo VIII se añadió la la parte construida en sillería y sillarejo.

Entorno histórico

Cueva Santa de Liébana: Vista exterior.La Liébana -territorio Libanensis antiguo, apéndice importante de la Asturias de Santillana- es una de las comarcas cántabras con más historia secular. En el siglo VIII fue foco cultural que brilló con luz propia por la presencia de magnates, monjes y clérigos que, ante la expansión del invasor musulmán por todo el territorio peninsular, buscaron refugio en este valle protegido por imponentes límites naturales como son los Picos de Europa, la Montaña Palentina y el cordal de Peña Sagra; y bendecido por un microclima mediterráneo que consigue que sus tierras sean un completo vergel.

A principios de la Reconquista se construyeron por toda la comarca, regada principalmente por el río Deva, una pléyade de monasterios sobresaliendo de entre ellos el de San Martín de Turieno, conocido más tarde como Santo Toribio de Liébana. De éste fue prior, en las postrimerías del siglo VIII, el conocido  teólogo y polemista Beato de Liébana, autor de los Comentarios al Apocalípsis, obra sin par durante todo el Medievo y, en la actualidad, de resonancia mundial al incluir en todas las copias caligráficas que se hicieron en los scriptorium monacales de la obra primigenia estampas conocidas con el sobrenombre de “Beatos”.

Estructura de la Cueva Santa de LiébanaEn torno al monasterio surgieron en aquella época de tanto fervor religioso numerosos oratorios, ermitas o capillas que los propios monjes erigieron para estar en completa soledad en su recogimiento espiritual. Al correr de los siglos estas edificaciones personales se convirtieron en ermitas bajo la advocación de un santo del que posiblemente guardasen reliquias. De esta manera la ladera norte del monte de la Viorna -de numínica pasó a ser cristianizada- se ubicaron la mayoría de los enclaves religiosos, convirtiéndose en adelante en un lugar de peregrinación para los lebaniegos.

De todas aquellas edificaciones destaca por su antigüedad la conocida Cueva Santa elegida como lugar de retiro cenobítico del monje Santo Toribio, fundador, en el siglo VI, del monasterio de San Martín de Turieno, que a partir de la duodécima centuria llevó el nombre del fundador. Según una tradición recogida en 1601 por el monje, Prudencio de Sandoval, señala lo siguiente: “queriendo pelear con el enemigo a solas, subiose a lo alto del monte y en parte muy escondida del labró una pequeña ermita, donde con mucha abstinencia, disciplina, continua oración y lágrimas llegó a tener tanta perfección que alcanzó de Dios singulares favores”  Otra tradición muy arraigada ente los lugareños refiere que el santo no sabiendo dónde construir el cenobio subió a lo más alto de la Viorna y arrojó su báculo al abismo diciendo: “Donde caiga mi cayada, allí será mi morada“. Dicho y hecho. No confundir este santo, que fue obispo de Palencia, con otro Toribio, el de Astorga, que también fue santo. Éste fue enviado por el Papa, San León I, a Jerusalén. A su regreso vino cargado de importantes reliquias, entre ellas un trozo del brazo izquierdo de la Cruz de Cristo, el Lignum Crucis. Ante el peligro que suponía las razzias de los musulmanes a la ciudad de Astorga la trajeron a este recóndito lugar de la comarca lebaniega  donde ha sido conservada hasta hoy en el monasterio citado.

Descripción

Cueva Santa de Liébana: Cueva Santa se halla situada hacia la mitad de la vertiente norte del monte de la Viorna. Es un edificio humilde que aprovecha en parte un pequeña gruta natural. Consta de dos plantas. La entrada a la primera se realiza por medio de una tosca puerta de arco de medio punto de cuatro dovelas. En algunas de éstas se perciben varios signos: una cruz pometeada, triángulos y montañas. El arco apea sobre cimacios rústicos sostenidos por jambas monolíticas. El habitáculo, destinado a celda, es de forma rectangular con una pared formada por la propia roca y la otra de sillares sin devastar, menos los esquinales, que están trabajados. En el muro opuesto de la entrada existe una ventanita rectangular a modo de “ojo de cerradura” enmarcada con piedra porosa.  Unas grandes lajas cubren el techo dándole un aspecto megalítico. A la planta superior se accede por medio de una rampa. Parece ser que fue destinada a capilla. En la actualidad sólo queda el casar, aunque en los trabajos de adecentamiento  que se realizaron en el edificio en 1991 se descubrieron varios sillares que podrían haber pertenecido al iconostasio.

Según García Guinea “el aspecto de Cueva Santa nos lleva a considerarle prerrománico, del siglo IX o X, por ciertas concomitancias con el estilo astur, tan próximo, en el espacio y relacionado política, religiosa y económicamente en el tiempo”


Otra información de interés

Localización: Situada en las proximidades del Monasterio de Santo Torribio de Liébana, en la ladera norte del monte de la Viorna, término municipal de Camaleño, comarca de Liébana, provincia de Cantabria.
Coordenadas GPS: 43° 9′ 1,20″N 4° 39′ 15,62″O.
Acceso: Partiendo de Potes en dirección a Fuente-De, kilómetro 1, está la desviación al monasterio de Santo Toribio. Por el lado oeste del monasterio se inicia una pista de tierra que conduce a la ermita de Santa Catalina. A unos 500 m., hay una bifurcación con una señalización que nos indica la dirección de Cueva Santa equidistante 1,5 km. El recorrido sólo se puede realizar a pie y es un paseo por un terreno con algún que otro desnivel.

 

Bibliografía

El monasterio de Santo Toribio de Liébana. García Guinea, M.A. Editorial Everest
El Románico en Cantabria. García Guinea, M.A. Editorial ESTVDIO. Santander 1991, pp 145-152.
Caminar por Liébana. García Palomo, A. Editorial ESTVUDIO. Santander 1995, pp 77-80.
Ermitas del monasterio de Santo Toribio. Campuzano Ruiz, E. y Bohígas Roldán, R. “La Revista de Cantabria” (Enero-Marzo 2007). Publicada por Caja Cantabria.

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